Riestra volvió a la victoria después de nueve fechas frente a Santamarina y terminó el año con una sonrisa.

Los resultados no han sido los mejores en esta primera mitad del campeonato para el Blanquinegro. Sin embargo, en el último partido del 2017 volvió a sumar de a tres gracias a un penal de Borda en el primer tiempo. Dominó de principio a fin y aunque tuvo oportunidades para que la diferencia fuera más abultada, no tuvo inconvenientes para superar al conjunto tandilense. Por su parte el Aurinegro tuvo buenas intenciones, especialmente en el segundo tiempo, pero no le alcanzó para vencer la valla de Morel y de esta forma perdieron la posibilidad de acercarse a la zona de reducido.

El local impuso el ritmo desde el comienzo y poco a poco comenzó a llevar peligro al arco de Papeleo, aunque en los primeros minutos le faltaba precisión cuando pisaba el área rival. A los 10 minutos, un cabezazo de Flores que terminó en el travesaño gracias a la intervención del arquero de Santamarina. Minutos más tarde, en un tiro libre Bora tocó por abajo para Velasco que remató al arco pero tampoco se dio. Entre González y Pérez intentaban en la delantera del Aurinegro poder acercarse a la valla contraria pero la defensa no tenía inconvenientes para detener esas aproximaciones. Un error en la defensa de la visita tras un tiro de esquina le dejó la pelota en la cabeza a López que no pudo rematar con potencia y Papaleo salvó en la línea una vez más.

Riestra merecía la victoria parcial y llegó. Al minuto 32, Velasco realizó una gran jugada individual en la que superó con una gambeta a Politano y el central González en el intento de quitarle la pelota cometió un claro penal. Borda fue el encargado de patearlo  y no perdonó. Un remate fuerte, al palo izquierdo y cerca del travesaño. Después del gol el equipo de Benítez jugó con mayor tranquilidad y a pesar de que no generó ocasiones para aumentar la ventaja tampoco sufrió en el fondo.

Santamarina buscaba la igualdad en el inicio del complemento pero las riendas del partido seguían en manos del equipo del Bajo Flores que a los 4 minutos se perdía el segundo. Un centro de Borda encontró en el área a Soto que remató desviado. Dos minutos más tarde, el juez principal principal cobró un nuevo penal para el local por una mano de Pérez en el área del Aurinegro. Velasco se dispuso a cambiar la sanción  por gol pero la pelota estalló en el travesaño, picó en el suelo y tampoco pudo concretar en el rebote.

El panorama fue el mismo durante el resto de la segunda mitad en el que la pelota pasaba mayor tiempo en pies de los visitantes. A pesar de esto, salvo un remate de Politano que pasó cerca del palo izquierdo de Morel, cuando caía el telón del encuentro, la diferencia nunca peligró y Papaleo tuvo que aparecer en varias ocasiones para evitar lo que podría haber sido una goleada. El pitazo final en el Estadio Eduardo Gallardón sentenció la justa victoria con la que cierra su año Riestra y amarga al conjunto tandilense.

 

Lucas Arenas