El primer tiempo del FC Barcelona ante el Dinamo de Kiev fue preocupante desde el rendimiento, a tal punto que Ronald Koeman, para levantar al público y movilizar al equipo, sacó a calentar a Ansu Fati, que comenzó como titular.

Con el correr de los minutos aparecieron los silbidos por el nivel mostrado y la realidad es que el más culé de todos abrió el marcador. Al minuto 36, tras un centro de Jordi Alba, Gerard Piqué entró solo por derecha y metió una volea precisa para fusilar al arquero rival.

Piqué lo gritó con todo porque el clima en Camp Nou no estaba siendo el mejor y además porque el FC Barcelona necesitaba imperiosamente irse ganando al entretiempo para no entrar en un nerviosismo general.

Getty Images.