El 9 de Boca, que se sacó la mufa ante Colón, ya había convertido un tanto similar pero con la camiseta de Lanús.

Mismo arco. Misma definición. Mismo gol. En su octavo partido en Boca, Nicolás Orsini logró «sacarse» la mufa y convertir su primer tanto con la camiseta del Xeneize. Tras varias semanas parado por lesión, Nico se ganó la titularidad en el 11 de Sebastián Battaglia y se destapó en la red justo en la previa del Superclásico. Pero su gol, además de darle el triunfo a Boca sobre Colón, contó con una particularidad: fue muy similar a otro que había convertido con Lanús jugando en la Bombonera.

Tanto el 1-0 ante Colón como el 2-0 (parcial frente a Boca), Orsini los convirtió en el arco que da espaldas al Riachuelo, donde antiguamente se ubicaba la parcialidad visitante. Ahí, de hecho, marcó sus tres tantos en el Templo. En el de Casa Amarilla todavía no pudo festejar.

 

Los dos gritos fueron de gran factura. El domingo, todo comenzó en los pies de Marcos Rojo. El zaguero descargó con Molinas, que rompió líneas con sutil toquecito para Pavón y luego Kichán hizo el resto. Avanzó unos metros, esperó a que Orsini le pasara por afuera y lo dejó cara a cara con el arquero. Pero Nico también tuvo su mérito, claro.

El gran mérito de calzar la pelota de derecha y, sin pararla, la puso junto a un palo. Una definición bastante parecida a aquella del 20/11 pasado con la que Nico llamó la atención de Riquelme y compañía.

Mi podio de los tres que mas se destacaron : Pavón, Rojo y Almendra.

Por Jonatan Reinoso