El Real Madrid derrotó por 1-0 a Gremio y se quedó con el Mundial de Clubes.

En un partido con resultado cerrado pero amplia superioridad, los españoles vuelven a coronarse campeones del mundo de la mano de Cristiano Ronaldo. El portugués convirtió el único tanto del partido.

Los primeros minutos Grêmio tuvo buena presión y contrarrestó un poco al Madrid. Después el Real ya comenzó a manejar la pelota por intermedio de Modric, Kross e Isco y al Grêmio se le hizo imposible llegar con chances al arco rival. En defensa el mejor del Grêmio fue Geromel. Cristiano tuvo una clara de tiro libre. El mediocampista croata había pateado una que cruzó cerca del palo.

En el segundo tiempo los brasileños estaban opacados por el volumen de juego del equipo de Zidane. Le costaría mucho al representante de la Conmebol avanzar en terreno rival. Aunque el gol del Real Madrid llegaría de la manera más insólita. Un tiro libre de CR7 que pasó por el medio de la barrera ya que Lucas Barrios no se posicionó bien en la misma a la hora de saltar.

Cristiano Ronaldo y Walter Kannemann, cara a cara nuevamente luego de la final del 2014.

 

El defensor argentino Walter Kannemann fue de lo mejor en el equipo gaúcho. Tuvo buenos cruces en un partido donde su equipo fue ampliamente inferior al rival. Gremio generó muy poco para empatar el partido y le faltó peso en los últimos metros para romper la meta de Keylor Navas. El Real Madrid se defendió atacando, tuvo un par de ocasiones para sentenciar el partido pero no tuvo efectividad para definir.