El Inter de Milán busca refuerzos en ataque tras la salida de Romelu Lukaku. El belga ha dejado un enorme vacío en la delantera del conjunto italiano que Edin Dzeko trata de suplir a toda costa. El bosnio, de hecho, apenas ha tenido descanso hasta ahora, que será suplido por el chileno, Alexis Sánchez, para descansar para los partidos venideros.

Inzaghi confía en que Alexis muestre de lo que es capaz y demuestre que puede continuar en el cuadro nerazzurri hasta final de temporada, donde su salida será prácticamente segura, según informa ‘Tuttosport’. Sin embargo, de no pasar esta pequeña prueba con el técnico italiano, el atacante chileno podría abandonar el club en el mes de enero, es decir, antes de lo previsto.

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Según Calciomercato, el delantero de Chile tampoco está contento con su situación, ya que se ha visto totalmente desplazado tras la llegada de nombres como el de Joaquín Correa y Edin Dzeko. De hecho, para que se den todos los condicionantes de su salida, Alexis deberá manifestarlo y hablar con el club para que le permita salir durante el mes de enero, aunque, como venimos diciendo, el Inter no le pondría trabas.

El problema para que se efectúe su salida, ya sea definitivamente en enero o a final de temporada, es su elevado salario. El sudamericano cobra nada más y nada menos que 7 millones por temporada, un costo que pocos clubes están dispuestos a asumir por el futbolista de 32 años, por lo que, si quiere seguir en la élite del fútbol europeo, tendrá que replantearse una rebaja de su sueldo.

Alexis Sánchez ha sonado en toda Europa, tanto en España, donde Sevilla y Betis estaban interesados, como en Francia, donde Sampaoli esperaba hacerse con él para el Marsella, como en Argentina, donde fue ofrecido a River recientemente. El chileno quiere seguir siendo importante, pero alguien tendrá que apostar por él para que eso suceda.