Asombra Julián Álvarez superándose fecha tras fecha y poniendo de rodillas a todo el fútbol argentino. Ahora ya tiene su póker, sus primeros cuatro goles en un partido. Todo lo hizo en el 5-0 de River contra Patronato, en una noche de furiosa contundencia en el Monumental que le sirvió además para ubicarse como el segundo mejor Sub 21 del mundo, detrás de Erling Haaland.

Ya venía siendo desde hace un par de semanas el mejor Sub 21 de Sudamérica. Ahora en ese rango de edad también se encuentra bien arriba en el ránking que incluye la sumatoria de goles y asistencias en las distintas ligas de Primera División del mundo. Según los datos de Sudanalytics, Julián Alvarez acumula 40 y se encuentra segundo del noruego Haaland.

Es brutal la actualidad del cordobés de 21 años. Como para que el fútbol europeo, que ya lo apuntó, lo mire todavía con mayor devoción. Julián Alvarez representa la bandera de un River que marcha hacia la conquista de liga argentina, líder con siete puntos de ventaja. Esa diferencia la patentó con su funcionamiento, con las 28 unidades atrapadas de las últimas 30 disputadas y con el inmenso trabajo del técnico Marcelo Gallardo, pero la sacó más que nada por los números impactantes de este juvenil tan singular: 15 goles en 1186 minutos distribuidos en 16 partidos.

No sólo es el máximo anotador de la liga argentina. Si se realiza un recorte de los últimos 10 partidos de River, aparece Julián Alvarez arrasando con 14 goles y 5 asistencias. Es decir que fue partícipe directo en 19 goles del equipo. A Boca le hizo un doblete, a San Lorenzo un hat-trick y ahora un póker…

De los cuatro goles que celebró contra Patronato, los tres primeros primeros los hizo en una ráfaga de 11 minutos, entre los 29 y los 40 del primer tiempo: uno empujándola a un par de metros del arco, otro presionando y quitándosela al arquero Matías Ibáñez para luego empujarla al arco vacío y el restante cabeceando a la red tras una atajada del portero. El cuarto llegó en la etapa final, al resolver un mano a mano definiendo de zurda y de una. Gallardo trata de explicar el fenómeno Alvarez: «Es difícil determinar cuál fue el momento del click de Julián. Cuando sos joven hay que atravesar situaciones. Con Julián nunca aceleramos los momentos. Hoy es un ejemplo para los otros chicos. Su actualidad es buenísima y sigue siendo superadora».