El comienzo de la “proyecto” de Ralf Rangnick en Old Trafford comenzó repleto de sueños con la victoria del Manchester United por la mínima ante Crystal Palace, en un encuentro donde merecieron ganar con mucha más holgura y sentaron las bases del cambio que necesitaba el equipo para estar a la altura de la plantilla que tienen. El cambio fue radical y, aunque eso no sea ni bueno ni malo, significa que el impacto del alemán fue casi inmediato.

El plan del entrenador alemán fue fiel a todo lo que ha construido y pregonado desde su llegada a la élite. Un estilo marcado por lo que domina Europa en la actualidad por la manera de defender y atacar, aunque hay que agregar que con pelota mostró una verticalidad bastante marcada y que puede ser el punto de partida para ver una versión más dominante del Manchester United.